jueves, 5 de marzo de 2015

Citas fallidas (amor propio)

Conocer a alguien por casualidad, hablar, intercambiar números, hablar, hablar, hablar, que todo marche sobre ruedas hasta que...
La cita, la famosa "primera cita", esa, la que más nervios da, te preparás mentalmente para no hacer papelones, elegís lo que te vas a poner, como te vas a peinar, controlás tu maquillaje una y otra vez, intentás estar perfecta. 
Se ven, va todo bien hasta que puf, te das cuenta de que no es lo que esperabas, ni él, ni vos, a la legua se nota que ambos tenían expectativas diferentes, que buscaban cosas diferentes, que él parece no escucharte y que a vos ni siquiera te preocupa, porque tampoco es que lo estés escuchando demasiado. 
Te das cuenta, a lo bruto, de que es el mismo tipo de persona de la que te estás intentando alejar, que al final es cierto eso de que sos un imán de idiotas, que todos los que te interesan parecen hechos a molde o que un hada mala te maldijo al nacer para toparte únicamente con esta clase de gente. 
Y quizás en un pasado te hubiera parecido divertido, pero ahora te sentís un poquito más madura, te das cuenta de que no es para vos.
Y en un abrir y cerrar de ojos, la cita termina en la basura, por suerte y pasas los primeros días decepcionada porque esta vez pensabas que iba a ser diferente, que él iba a ser diferente, pero después te agradecés a vos misma por empezar a valorarte.

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